El fenómeno Souls: la dificultad como característica definitoria del videojuego

Sorprende la facilidad con la que los jugadores comparamos todos los nuevos títulos con nuestro juego favorito. éste fenómeno, al que llamaremos «comparación por fanatismo»aparece, sobre todo en dos grupos de fans: los fans de la saga Pokemon  y los de la saga Souls.

Los primeros suelen comparar todo juego que implique de una u otra manera capturar diversas criaturas con Pokemon. Ejemplo de ello es la constante comparación de la saga Yokai-Watch ( Level 5 2013-actualidad) con la saga Pokemon. Ambos títulos se basan en la captura de cierto número de criaturas y el realizar combates contra otras criaturas. No obstante, son dos IP diferentes con sus pros y sus contras.

Por su parte, el fan de la saga Souls (FromSoftware 2009-actualidad), suele comparar todo juego con una dificultad alta con su título de cabecera. Ejemplos no faltan. Uno de ellos, y posiblemente el más sonado, es el juego indie Cuphead (MDHR Studio 2017), en el que controlamos a Cuphead, un simpático personaje con una taza de café por cabeza, en su cruzada por salvar su alma del propio Diablo. Obviando el apartado visual de éste maravilloso título indie, reminiscente de los dibujos animados de los años 20, Cuphead destaca por su absurda dificultad, llegando ésta a ser incuso injusta.

También juegos ya asentados como God Of War (Santa Monica Studios 2005-actualidad), que en su época introdujo los llamados «Quick Time Event» de forma magistral, han evolucionado para adecuar sus controles a los de la saga Souls o aumentando su dificultad máxima a los niveles de la saga de FromSoftware.

¿A dónde quiero llegar soltando toda esta parrafada? Quiero llegar al hecho de que esta forma de pensamiento por parte del fan de X franquicia hacia otras nuevas IP, que implementan una característica definitoria como es la dificultad extrema, con su juego favorito, no hacen sino quitar el  mérito al desarrollador o a la compañía X de la creación de un nuevo universo, una nueva idea.

Y sí. Parece ser que el actual rumbo que está marcando el camino a nuevos creadores y desarrolladores es hacer el juego cuanto más difícil mejor. Por no hablar del abandono casi por completo de una historia o campaña decente como parece ser que hará el próximo CoD que se centrará en exclusiva en el Online sin contar con un modo campaña.